El liderazgo en el pueblo
Gnóstico se ha venido convirtiendo desde
que desencarno el Maestro Samael en un mercado de sabiondos con ansias de poder
y figuras con aires de grandeza, rebeldes, desobedientes que solo buscan fama, honores y llenasen los bolsillos con
un conocimiento que no es propio.
El liderazgo es una guerra
entre tirios y troyanos todo por la supremacía de querer gobernar un pueblo
descarriado donde cada cual quiere hacer de la doctrina lo que se le venga en
gana, el discípulo quiere superar al maestro sin haber aprendido la lección.
El líder no se corrige, no
da ejemplo, no es obediente, se cree que lo sabe todo, entonces piensa en hacer
otro grupo para poder manejarlo a su antojo, otros se van del templo como
gallinas asustadas y cacareando por que no están de acuerdo con la forma de
manejar las cosas y van de grupo en grupo llevando y trayendo chismes poniendo
a unos contra otros, desconociendo el daño que se causan y le causan a los
demás.
Algunos líderes piensan en
unir al pueblo gnóstico de todas las latitudes pero no lo consiguen porque no
hay con quien contar, la razón es sencilla nadie quiere encarnar la doctrina pero si quieren poderes sin que les cueste
nada, quieren seguidores que les aplauda las fantasías que tienen en su propia
psiquis y eso es todo.
A como están las cosas
quieres ser líder (gobernar), aprende la obediencia, la humildad, lealtad y
amor por los demás entonces será posible ver nuestro pueblo unido sin egoísmo, lleno
de virtudes, nueva cultura, nueva generación, un pueblo nuevo.
¿Quién es sabio y entendido entre vosotros? Muestre
por la buena conducta sus obras en sabia mansedumbre. Cap. 3
V. 13 Stg.
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